¿Dónde debería vivir durante mi divorcio?

Una de las decisiones más importantes que tendrá que tomar cuando decida estar listo para el divorcio es dónde vivirá. Es posible que desee salir de su hogar conyugal, pero ¿es una buena idea? Tal vez no quiera renunciar al lugar que ha amado. Si está recién separado, aquí hay algunas cosas que debe saber al elegir dónde vivir.

Quedarse en la casa del matrimonio

Muchas parejas divorciadas, especialmente aquellas con hijos, optan por que alguno de los dos permanezca en el hogar conyugal. Sin embargo, decidir quién se queda y quién se va puede ser complicado. Para muchas personas, su hogar es su mayor activo, y mudarse puede sentirse como si se lo estuviera entregando al otro cónyuge. Independientemente de quién permanezca en la casa, la decisión sobre quién será el propietario único de la vivienda no se tomará hasta que se dividan los activos en corte. Hay algunas maneras de ayudarlo a determinar quién debe permanecer en el hogar conyugal. ¿Alguno de ustedes tenía el inmueble antes de casarse, o puso más bienes personales en el hogar? Entonces esa persona puede elegir ser la que se queda. En el caso de padres que criaron a sus hijos quedándose en casa, muchas parejas eligen que éstos permanezcan en el hogar para la comodidad y estabilidad de los niños. Si se encuentra en una situación de violencia doméstica, es importante que la víctima resida donde se sienta más segura. Esto puede requerir una orden de restricción para obligar al abusador a mudarse, o mantenerlos fuera de la casa temporalmente mientras la víctima mueve sus pertenencias.

Mudarse

Elegir mudarse del hogar conyugal puede verse como un nuevo comienzo para muchas personas. Usted desea alejarse de los recuerdos y comenzar su nueva vida. Si bien mudarse puede ser difícil, puede pensar que es lo que necesita para tener un rompimiento completo y seguir adelante. Si se va y su cónyuge se queda, asegúrese de controlar de cerca la condición de la casa y los gastos relacionados. A menos que haya resuelto algo con su cónyuge, es posible que deba pagar una parte de la hipoteca, que puede ser costosa.

Vivir juntos

Para algunas parejas, la mudanza no es una opción. Si es éste su caso, usted y su cónyuge comparten la casa, prácticamente como compañeros de cuarto. Este acuerdo puede presentar muchos de sus propios desafíos, y puede ser mejor trabajar con un consejero para ayudarlo en la nueva situación. Encontrar su propio espacio en el hogar, así como compartir los gastos de la manera más uniforme posible, es clave para hacer que la convivencia funcione.

Otras alternativas

Una nueva tendencia entre las parejas con hijos es la “anidación”. Esto significa que los niños no se mudan de casa en casa para ver a los padres; en cambio, los padres se quedan en la casa durante el tiempo que les corresponda con los niños y viven en otro lugar durante los períodos de no custodia. Usted y su cónyuge pueden optar por manejar su divorcio de esta manera, a corto plazo o de forma permanente, si tiene hijos muy pequeños o para quienes la transición a un nuevo hogar cada ciertos días sería perjudicial. Al igual que con la convivencia, la anidación requiere un cuidadoso equilibrio de espacio personal, privado y gastos compartidos, pero puede funcionar si usted y su cónyuge están comprometidos.

Abogado experimentado en divorcios en Maryland central

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